Peter Lamelas, un médico y empresario cubano-estadounidense sin experiencia diplomática previa, fue formalmente presentado este martes ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de los Estados Unidos como candidato a ocupar la embajada en Argentina. La nominación, impulsada por Donald Trump, expone con claridad el enfoque geopolítico que la próxima administración republicana pretende consolidar en América Latina: limitar la influencia de potencias como China, Irán, Cuba, Venezuela y Nicaragua, al tiempo que refuerza los lazos bilaterales con gobiernos ideológicamente afines, como el de Javier Milei.

Durante su discurso, Lamelas subrayó que su principal misión será “contrarrestar la influencia maligna de potencias adversarias” y crear condiciones para que las inversiones y el comercio beneficien prioritariamente a empresas estadounidenses. “Creo que nuestra relación entre Estados Unidos y Argentina será un ejemplo brillante para el resto de Latinoamérica”, aseguró.

Apoyo explícito a Milei y advertencia sobre China

El candidato a embajador no escatimó elogios hacia el presidente argentino y destacó que Trump le pidió personalmente “trabajar con su amigo Javier” para “alcanzar una grandeza sin precedentes”. Lamelas incluso afirmó que Estados Unidos “puede aprender mucho de Milei” y de su gestión económica, centrada en el ajuste fiscal, la desregulación del mercado y la ruptura con el estatismo.

Entre sus objetivos diplomáticos, Lamelas detalló que buscará impulsar un mayor comercio bilateral, promover inversiones estadounidenses en sectores clave como energía y minerales estratégicos, y reducir barreras no arancelarias como el IVA, los controles de cambio o las demoras portuarias. Pero el foco central estará en limitar la proyección del Partido Comunista Chino (PCCh) en la región. “Tengo un plan que con gusto compartiré… vamos a mejorar las relaciones entre Estados Unidos y Argentina y a expulsar a China poco a poco”, prometió.

Cooperación federal y mirada regional

El aspirante a embajador remarcó que uno de los mayores desafíos será lidiar con el sistema federal argentino: “Cada provincia tiene su propia administración y puede hacer acuerdos con China”. Por eso, señaló que su estrategia no se limitará a interlocutores nacionales como el presidente Milei, Gerardo Werthein o los hermanos Caputo, sino que buscará “dialogar con las 23 provincias”.

Estados Unidos ve a la Argentina como un actor vital en el tablero sudamericano, especialmente frente al avance de gobiernos de “alineamiento intermedio” que exploran vínculos con China o Rusia. En ese marco, Lamelas insistió en la necesidad de reforzar la seguridad regional, la cooperación policial, el intercambio de inteligencia y la lucha contra el narcotráfico.

Neutralidad en Malvinas y eventual visita a las islas

Al ser consultado por la cuestión de las Islas Malvinas, Lamelas repitió la histórica posición estadounidense de neutralidad. Reconoció la administración británica sobre el territorio, pero no su soberanía, y se mostró a favor del diálogo entre Argentina y el Reino Unido. Incluso dijo que, de surgir la oportunidad, estaría dispuesto a visitar las islas como parte de sus tareas de “divulgación diplomática”.

Una designación política

Peter Lamelas no proviene del cuerpo diplomático. Su perfil encaja con la estrategia de Trump de nombrar embajadores leales o cercanos al Partido Republicano. Fundador de la red de atención médica de urgencias más grande de Florida, Lamelas es una figura respetada dentro de la comunidad cubano-estadounidense y ha respaldado activamente la agenda del expresidente. Su historia personal —fuga del comunismo, éxito económico y compromiso conservador— es presentada como un ejemplo del “sueño americano”.

Ya tuvo su primer acercamiento con Milei en noviembre pasado, en la residencia de Trump en Mar-a-Lago, y desde entonces ha expresado públicamente su entusiasmo por el rumbo que adoptó el libertario argentino. Si el Senado confirma su nominación, la embajada estadounidense en Buenos Aires será un nodo clave de la estrategia regional trumpista: más mercado, más alineamiento ideológico, menos China.