La interna de La Libertad Avanza en Chubut sumó un nuevo y escandaloso capítulo este sábado, cuando el periodista y precandidato libertario Ricardo Bustos fue detenido en un acto político en Esquel, acusado de violar una medida cautelar que le prohíbe acercarse al diputado nacional César Treffinger, referente del oficialismo libertario en la provincia y hombre de confianza de Karina Milei.

La denuncia que motivó la medida fue presentada por el propio Treffinger, quien acusó a Bustos de haber tomado una fotografía suya junto a su hijo menor en un local partidario sin consentimiento, y de haberla enviado luego a su teléfono personal en tono considerado intimidante. La Justicia, a través de la Oficina Judicial de Comodoro Rivadavia, dictó el pasado 11 de julio una restricción de acercamiento que prohíbe a Bustos cualquier tipo de contacto físico o digital con Treffinger y su familia, incluyendo la participación en eventos donde pudiera estar presente el legislador.

Pese a esta orden, Bustos se presentó este sábado en un acto público en Esquel, lo que motivó su inmediata detención por parte de la Policía provincial. El episodio desató una ola de reacciones en redes sociales y volvió a exponer la profunda crisis interna que atraviesa La Libertad Avanza en esa provincia patagónica.

Desde sus redes, el propio Treffinger celebró el arresto con una frase provocadora: “No odiamos lo suficiente a los periodistas, claramente este individuo integra el 90% al que se refiere siempre Javier Milei”, en referencia al habitual discurso del Presidente sobre el periodismo nacional. El mandatario, lejos de tomar distancia, amplificó el mensaje compartiéndolo desde su cuenta oficial, lo que le imprimió mayor gravedad institucional al hecho.

Las respuestas no tardaron en llegar. El sector de Bustos, que conformó el espacio Liberales de Chubut, sostiene desde hace meses que es víctima de una persecución política interna. Según denuncian, la conducción del partido en manos de Treffinger bloquea toda participación democrática, retiene fichas de afiliación y utiliza herramientas judiciales para silenciar a los críticos.

“En Chubut, el que se hace llamar libertario te mete una cautelar si opinás distinto”, expresaron desde las redes del espacio disidente. El propio Bustos, antes de ser trasladado, apuntó con dureza: “Esto no es justicia. Es represión interna disfrazada de legalidad”. Su equipo legal ya presentó un recurso para intentar revertir la medida judicial que lo mantiene alejado de la vida partidaria.